La receta de hoy, que es una verdadera exquisitez, se la debemos a mi amiga Begoña R. Desde que compartió su receta en el grupo de amigas de Cibus Sanus, la he hecho en varias ocasiones, añadiendo otros ingredientes como taquitos de fiambre de pavo, maíz o trocitos de gambas cocidas. Como dice Begoña: "Ponedle lo que se os ocurra".
En España es cada vez más frecuente ver este pseudocereal - cuyos beneficios para la salud son incontestables - en los supermercados, así que si no lo habéis probado todavía, no vais a tener dificultad en encontrarlo.
Las cantidades que os doy son orientativas, para unas cuatro raciones, pero podéis ir combinando más o menos cantidad de ingredientes en función de vuestros gustos particulares.
- 1/2 taza de quinoa cocida
- 1 aguacate grande
- 1 tomate grande
- 1 huevo duro
- 1 cebolla
- aceite de oliva virgen extra
- vinagre balsámico
- sal
- lechuga para acompañar
PREPARACIÓN
- Cocemos la quinoa durante 15 minutos, o el tiempo que indique el envase, escurrimos el agua y reservamos hasta que enfríe.
- Picamos en cuadraditos pequeños todos los ingredientes.
- Mezclamos todo, menos las hojas de lechuga que reservaremos.
- Podernos aliñar la ensalada haciendo una emulsión con el aceite de oliva, el vinagre y la sal y echarlo antes o después de empatar.
PRESENTACIÓN
- Colocamos en medio de cada plato, con la ayuda de un aro de emplatar, una ración de ensalada de quinoa.
- Decoramos la superficie de la montaña con un tomate cherry cortado en gajos.
- Ponemos alrededor lechuga cortada en juliana.
No dejéis de ver la presentación de Begoña en "Hecho por ti". ¡Debería de tener ella también un blog! ¡Me haría seguidora sin lugar a dudas! Jajaja.
Un beso,
2 comentarios:
Menuda pintaza Mercedes!! A ver si la hago pronto!������
¡Verás qué bueno está! Y sacia un montón. Perfecto como plato único.
Ya me contarás...
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